Qué son los Pródromos de Parto

Los pródromos de parto son todo el conjunto de cambios que suceden antes de que se desencadene el proceso de parto, son necesarios para preparar el cuerpo para el nacimiento del bebé, todas las mujeres tienen que pasar por estos cambios de una forma u otra.  

Lo que puede suceder en esta etapa

• Contracciones uterinas normalmente irregulares, que pueden ceder en reposo, frecuentemente se inician por la noche y ceden por la mañana si no llegan a ser contracciones regulares que desencadenen el parto.
• Su duración suele ser menor de 1 minuto, y de poca intensidad. 
• Dolores en la pelvis: esto se debe a que los 2-3 días previos al desencadenamiento del parto aumenta el nivel de relaxina, que favorece la movilidad de los huesos que la conforman.
• Expulsión del tapón mucoso del cuello del útero y/o aumento del flujo vaginal. El tapón mucoso es una sustancia viscosa, que puede ser blanquecino, amarillo o marrón. Su función consiste en proteger el útero y a tu bebé de posibles infecciones. También puede haber una pequeña pérdida de sangre.
• Vómitos y/o diarrea.
• Cambios conductuales, como inquietud por ver cercano el momento del parto, necesidad de acabar los últimos preparativos para la llegada del bebé… (Síndrome del nido)

Los prodromos de parto pueden durar horas, días, e incluso en ocasiones semanas, y cuando este proceso se alarga puede ser desesperante, e incluso, ser signo de que algo no está sucediendo como debería.

¿Qué hacemos?

A veces podemos evitar unos pródromos de parto largos con cierta suplementación, para conseguir que los músculos estén más relajados.

En otros casos es bueno que el parto comience ya cuando la mujer está muy cansada, para lo cual se pueden regular esas contracciones con diferentes técnicas naturales dependiendo de la historia clínica de la mamá y de la salud del bebé. Si necesitas ampliar más esta información, puedes contactar conmigo para ver cómo te puedo ayudar a ponerte de parto activo. 

Si las contracciones permiten descanso es muy importante coger fuerzas y estar bien hidratadas o nutridas para que cuando llegue el parto tengamos energías. Dormir una buena siesta es una gran idea y así disfrutar estos últimos momentos del embarazo.

Hacer actividades placenteras y relajantes. Una vida normal relajada, donde nos dejamos cuidar y nos cuiden.